Decimocuarta etapa.-
En esta etapa, que realizamos el día 19/08/2021 nos propusimos recorrer el río Merdás, último afluente que vierte sobre el Freser en Campdevánol, antes de su desembocadura sobre el Ter en Ripoll y para completar el promedio de 20 kilómetros por etapa, seguir junto al Ter hasta la ermita del Remei, donde desemboca la riera de Les Lloses.
En la explanada donde pensábamos aparcar el coche del fin de etapa, habían puesto cintas para impedir que se aparcara allí, porque al parecer está reservada para un restaurante que hay junto a la carretera. (Problemas de la masificación turistica de esta época del año). Así que tuvimos que retroceder para aparcar unos 500 metros en dirección a Ripoll.
Salimos del Cortal, 1,5 km mas arriba de Gombrén. Hay una explanada a la derecha del camino entre Cortal de Baix y Cortal de Dalt, donde pudimos aparcar el coche de principio de etapa. Justo enfrente del aparcamiento hay  un sendero que baja al río y por un puente antiguo se pasa a la orilla derecha.
Este camino,que baja frente a la población de Gombrén tiene unas hermosas vistas en este bonito entorno natural, pasando por Cal Prenset frente al molí de La Costa. A 1,5 km del inicio llegamos a la intersección del  Camí Ral de Gombrén a Campdevánol y seguimos por este camino, donde a menos de un kilómetro llegamos al paraje Xorigueres donde están las masías Can Macari y ca l’Andaldic en un bonito y sombreado lugar. Desde allí, 1,5 km mas adelante salimos a una casa junto a la carretera llamada El Empalme.
Desde este punto desaparece el Camí Ral y es obligatorio ir por la carretera C-401 unos 400 metros hasta el camino de entrada al camping Serradell. Hay un sendero que sale a la derecha que está barrado con unos maderos. Este es un sendero que aparece en el plano y que va a salir al camino de acceso al camping, evitando el paso por la carretera. Nosotros seguimos este sendero y llegamos a un punto  al final de un prado donde hay una vereda abandonada que habría que rehabilitar en un tramo de unos 20 metros para salir al camino. Se ve claro que este paso tropieza con la oposición de los propietarios y que constituye un abuso que pone en peligro la integridad física  de las personas obligadas a caminar por la carretera. Una vez más vemos lo necesaria que es una ley que impida estos abusos que son mas frecuentes de lo que podríamos imaginar y cuyo primer ejemplo lo encontramos en Aiguaviva junto al río Güell que fue lo que nos instigó a realizar la tarea que nos hemos propuesto de recorrer los 1000 kilómetros para denunciar cada tropelía.
Al llegar a la carretera de entrada al camping, hay que cruzar la carretera C-401 e ir por un camino acondicionado paralelo a la misma en algo menos de un kilómetro y que es obligado cruzar de nuevo la carretera y seguir por la misma hasta la ermita de Sant Llorenç de Campdevánol. En un tramo de menos de un kilómetro hay dos puntos negros que son perfectamente evitables, donde estuvimos explorando el terreno para ver lo fácil que hubiera sido pasar por allí el Camí Ral junto al río y que no tiene mas explicación que una oposición cerril de los propietarios de  los terrenos colindantes, a los que parece no importarles ni la naturaleza,  ni la vida de los viandantes.
Una vez pasada la ermita de Sant Llorenç de Campdevánol el camino se normaliza y se convierte en un agradable paseo junto al río Merdás.
En la zona bajo el camping Pirinenc, el agua empieza a oler mal y antes de salir al parking que hay junto a la carretera vimos un desagüe que es el causante de esta pestilencia.
Detrás del aparcamiento sigue el camino bien acondicionado junto al río pasando  junto a la masía el Cornut y entrando en Campdevánol por la Creu junto a la casa rural Cal Rei.
Desde allí sube un sendero señalizado con marcas amarillas en dirección a Ripoll, apartándose un poco del cauce del Freser y cruzando el torrent  de Estiulella hasta llegar tras dos kilómetros a  la masía el Vilar, donde hay que dar un pequeño rodeo para después bajar cruzando la vía del tren por debajo y llegando al Pla d’Ordina. Allí nos cruzamos con un pequeño tren turístico.
Desde el Pla d’Ordina ya no nos apartamos de la orilla del río, primero por el Freser y luego continuando por el Ter hasta llegar al punto donde teníamos aparcado el coche para finalizar la etapa después de recorrer unos 21 kilómetros.