Vigésimo octava etapa.-
Para esta etapa habíamos programado recorrer la Riera Major de Sant Sadurní d’Osormort, saliendo de Viladrau. Esta riera tiene la particularidad de recoger las aguas del macizo del Montseny, siendo la única que vierte sobre el Ter a partir de esta singular montaña, ya que el resto de las aguas de este macizo, o bien vierten sobre la Tordera o sobre el Besós.
Hemos realizado esta etapa el día 21/10/2021.
Salimos del aparcamiento situado en la Solana, y al no ver la vereda indicada en el plano junto a la carretera GI 520, tuvimos que andar casi un kilómetro por esta carretera hasta llegar al Pont de Can Pau Moliner. Allí intentamos tomar el sendero junto a la riera y vimos que era muy dificil de seguir, porque aunque había trazas de un antiguo sendero, el estado de abandono del mismo había hecho que la maleza se apoderase de todo el espacio. Cruzamos la riera y fuimos un pequeño trecho campo a traviesa hasta encotrar el sendero que baja desde Viladrau al campo de polo. Lo más recomendable era haber tomado este sendero desde la Solana. Seguimos hacia a la derecha apartándonos de la riera hasta que al llegar al campo de polo pasa junto a la riera de Sant Segimont hasta que poco mas abajo se une a la Riera Major.
Al llegar al Pont de la Noguerola seguimos por un camino de tierra que pasando por las caballerizas del club de polo fuimos a salir un poco mas adelante a la carretera GI 520 y bajando por el arcén de la izquierda llegamos  a un cruce hacia el Molí d’en Noc, pero a la entrada de este camino tropezamos con el habitual y clásico rótulo “ Camí particular Prohibit el pas”. Así que tuvimos que seguir por la carretera hasta Mas Vidal y allí tomar hacia la izquierda y continuar por el arcén de la GIP 5251 hacia la Noguera en el kilómetro 5 del recorrido. 800 metros mas adelante pasamos frente a un pequeño salto de agua y seguimos hasta el Pont de Fábregues, donde por fin pudimos dejar la carretera y seguir por un camino de tierra en dirección a Sant Sadurní d’Osormort cuando ya llevabamos andados 7 kilómetros.
El tramo desde Viladrau hasta el Pont de Fábregues lo podríamos  definir como lo que pudo haber sido y no fue, ya que aunque hay diversos senderos que evitarían el paso por las carreteras de vehículos, todos están copados por los particulares que impiden de modo abusivo el paso de senderistas, sin tener el menor escrúpulo en exponerlos al peligro que implica ir junto a los  vehículos motorizados Una vez más se manifiesta en su totalidad lo que llamamos “Efecto río Güell”.
El camino desde el Pont de Fábregues sigue junto a la riera Major pasando por el Molí del Soler hasta la carretera BV 5201. Allí intentamos seguir junto a la riera Major pero no había paso. Seguimos por la carretera hasta el mas La Boixeda y luego, pasando por debajo del viaducto de la C-25 proseguimos hasta Sant Sadurní d’Osormort adonde llegamos en el kilómetro 11,8 de la etapa.
En Sant Sadurní se veían muchos caballos pactando en los prados que bordean la riera. Es un pueblo muy pequeño con un bucólico entorno en el destacaran la masía Cal Ferrer, la iglesia y el edificio del ayuntamiento. No hay un núcleo urbano propiamente dicho, sino que el municipio está compuesto por masías dispersas.
En el refugio de pescadores junto a la riera hay una antiquísima pasarela hecha con troncos que aún se mantiene en pie y que constituye un punto de singular belleza.
Pasando Sant Sadurní a 1,5 km. hay un bonito puente medieval de un arco estilizado junto al Molí de Bojons. Cruzando la riera por un puente moderno paralelo al antiguo hay una urbanización con acceso privado por donde pensábamos pasar, pero al no tener la seguridad de que podríamos seguir por allí, decidimos seguir por la carretera.
Unos 300 metros después la carretera gira bruscamente a la derecha hacia Sant Hilari Sacalm y desde esa curva arranca un camino hacia el Pont de Malafogassa que es el que nosotros seguimos.
Este camino discurre paralelo a la riera Major aunque al principio se separa un poco, sobre todo donde desemboca la riera Fainé que baja desde las proximidades de Sant Hilari.
En el kilómetro 15,5 del recorrido llegamos a Crivillers, una gran masía abandonada desde donde  arranca un camino que después de cruzar la riera  sigue hacia la sierra de la Baga del Pont.
Poco mas de un kilómetro mas adelante nos volvimos a aproximar a la rieras en el Molí de Malafogassa y cuando llevabamos recorridos 18 kilómetros llegamos a la intersección desde donde sigue la carretera hacia Vilanova de Sau y por otra parte se continúa hacia el Pont de Malafogassa unos 300 metros mas adelante.
El Pont de Malafogassa es un bello puente del siglo XV compuesto por dos arcadas. Desde allí sale un camino que sube a Sant Andreu de Bancells.
A partir de este puente, ya no aparece en el plano ningún sendero que permita seguir  la riera Major hasta su desembocadura en el Ter, debido a la fuerte pendiente de las laderas a ambos lados. Luego nos enteramos que es posible pasar por el cauce en épocas de poco caudal, llevando calzado adecuado para ir por el agua.
Desde el puente subimos por una vereda que va paralela al Sot de Alarons y que a un kilómetro aproximadamente se une al sendero local 121. Poco mas arriba de esta intersección hay un sendero a la derecha que sube a Can Burjada a poco menos de un kilómetro. Teníamos la intención de seguir hacia Can Janet y Mas Romeu, pero por error  seguimos subiendo  hacia un depósito de agua que hay en la cima de Can Besunya desde donde ya no hay salida y tuvimos que retroceder el medio kilómetro que habíamos subido por ese camino.
Cuando llevábamos recorridos  21,5 km. Llegamos a Mas Romeu donde encontramos un camino asfaltado hacia Can Bufía situada a poco más de un kilómetro. Esta casa de turismo rural está situada en la parte mas alta de la montaña, desde donde hay unas magníficas vistas de todo el entorno.  Seguimos por esta carretera otro kilómetro y medio hasta Sant Romá de Sau, donde se inicia la escalera de bajada a la presa de Sau.
Esta escalera, que en la etapa anterior estimábamos que tendría unos 500 peldaños, nos tomamos la tarea de contarlos y comprobamos que había exactamente 471 peldaños.
Así llegamos al final de la décimo octava etapa, después de haber recorrido 24,6 kilómetros.